Advertencias contra mandamientos de hombres
16 Por tanto, que nadie se constituya en vuestro juez[s] con respecto a comida o bebida, o en cuanto a día de fiesta, o luna nueva, o día de reposo; 17 cosas que solo son sombra de lo que ha de venir, pero el cuerpo[t] pertenece a Cristo[u]. 18 Nadie os defraude de vuestro premio[v] deleitándose en la humillación de sí mismo[w] y en la adoración de los ángeles, basándose en las visiones que ha visto, hinchado sin causa por su mente carnal, 19 pero no asiéndose a la Cabeza, de la cual todo el cuerpo, nutrido y unido por las coyunturas y ligamentos[x], crece con un crecimiento que es de Dios.
20 Si habéis muerto con Cristo a los principios[y] elementales del mundo, ¿por qué, como si aún vivierais en el mundo, os sometéis a preceptos tales como: 21 no manipules[z], no gustes, no toques 22 (todos los cuales se refieren a cosas destinadas a perecer con el uso[aa]), según los preceptos y enseñanzas de los hombres? 23 Tales cosas tienen a la verdad, la apariencia de sabiduría en una religión humana[ab], en la humillación de sí mismo[ac] y en el trato severo del cuerpo, pero carecen de valor alguno contra los apetitos de la carne.